
Branding y startups: La clave para crecer y diferenciarse
La inversión en startups ha crecido de manera sostenida en los últimos años.
En España, informes como los de El Referente o el Observatorio Fundación Bankinter
reflejan cifras récord en 2021, con tendencias similares en mercados internacionales. Sin embargo, a pesar del auge del ecosistema emprendedor, solo el 10% de las startups logra sobrevivir en el tiempo.
Los factores que determinan el fracaso de una startup son bien conocidos (CBInsights, The Startup Genome Project):
- Falta de encaje producto-mercado
- Insuficiente financiación para escalar
- Problemas en la gestión del talento y la estructura del equipo
- Modelos de negocio inviables
- Errores de timing: entrar demasiado pronto o demasiado tarde
- Estrategias de marketing deficientes
- Falta de diferenciación y construcción de marca
Si bien el branding no es el único factor que determina el éxito, su ausencia puede limitar la escalabilidad de una startup. Construir una identidad fuerte y diferenciada no solo ayuda a captar clientes, sino también a atraer talento e inversión.

EL BRANDING EN STARTUPS: MÁS ALLÁ DEL DISEÑO
A menudo, en el mundo de las startups, la marca se reduce a un logo y una identidad visual. Sin embargo, el branding es un activo estratégico que define la percepción, la propuesta de valor y la conexión emocional con la audiencia. En muchos casos, la urgencia por validar el producto o captar usuarios lleva a descuidar la construcción de la marca, lo que puede generar problemas a largo plazo.
Como expertos en branding, en Brandesign entendemos que las marcas son organismos vivos, en constante evolución. Para una startup, el branding debe ser ágil, flexible y escalable. No se trata de definir una identidad rígida desde el inicio, sino de construir una plataforma de marca capaz de adaptarse a los cambios del mercado y a las necesidades de los clientes.
Un enfoque dinámico para la construcción de marca en startups
Las startups operan bajo presión constante. La necesidad de validar rápido el producto, iterar y atraer inversión hace que se prioricen las tácticas a corto plazo sobre la estrategia de marca. Sin embargo, una identidad bien definida puede ser el diferencial que garantice la sostenibilidad del negocio.
Introducción a la Marca Mínima Viable (MVB)
Así como el Minimum Viable Product (MVP) permite probar una idea con la mínima inversión, el concepto de Minimum Viable Brand (MVB) busca dotar a la startup de una identidad sólida y funcional sin frenar su crecimiento.
Los elementos clave de una MVB incluyen:
- Propuesta de valor y posicionamiento: ¿Por qué existimos? ¿Qué nos hace únicos?
- Personalidad y tono de comunicación: Definir cómo se expresa la marca.
- Storytelling: Crear una narrativa que genere conexión con inversores, clientes y talento.
- Identidad visual mínima: Un sistema de diseño funcional y adaptable.

¿Cuándo invertir en branding? Un enfoque por etapas
El branding no es un lujo reservado para startups consolidadas. Cada fase del crecimiento tiene necesidades específicas en términos de marca:
1. Seed Stage: Validando la idea
En esta etapa inicial, los fundadores están enfocados en construir el producto, probar su viabilidad y captar inversión inicial (FFF: Friends, Family & Fools). Aquí, el branding debe centrarse en:
- Un pitch sólido para atraer inversores.
- Un Minimum Viable Brand que refleje la visión del negocio.
- Storytelling para generar credibilidad en el ecosistema emprendedor.
2. Early Stage: Validación del modelo de negocio
Con las primeras métricas en marcha, es el momento de consolidar la identidad de marca. Una startup que solo tiene un logo pero no ha trabajado su branding puede enfrentar problemas de diferenciación. Aquí, la marca debe:
- Reflejar una propuesta de valor clara y diferenciada.
- Construir una reputación sólida para atraer talento y clientes.
- Iniciar estrategias de captación con coherencia en todos los puntos de contacto.
3. Growth: Escalabilidad y expansión
Cuando la startup entra en fase de crecimiento, la marca se convierte en un pilar estratégico. Es el momento de preguntarse:
- ¿Nuestra identidad sigue alineada con la visión y el mercado?
- ¿Necesitamos un rebranding para escalar a otros mercados?
- ¿Contamos con un sistema de diseño que permita mantener coherencia a gran escala?
Las startups disruptivas deben desafiar el status quo y generar lealtad en un entorno competitivo. Un branding bien ejecutado puede ser el factor que marque la diferencia entre una empresa que sobrevive y una que lidera su sector.

BRANDESIGN Agencia de Branding para Pymes en Madrid
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